La pandemia del COVID-19 es una crisis que afecta a todos y todas sin excepción. El virus llegó hace apenas unos meses y ya ha causado un grave impacto en nuestras vidas: se ha llevado miles de ellas y ha truncado las del resto. Vivimos una época de incertidumbre y el miedo se ha instaurado en nuestros hogares. Y a ese miedo, al igual que al virus, sólo hay una forma de vencerlo: permaneciendo unidos en la batalla.

Sigamos las instrucciones de los expertos en salud mundial y todo irá bien. Así lo estamos haciendo en MONA. El personal de administración, comunicación, educación e investigación está trabajando desde casa pero, como bien sabéis, de nosotros y nosotras depende la salud y el bienestar de los primates rescatados que habitan en nuestro Centro de Rehabilitación. Un equipo incansable de cuidadores y cuidadoras se está encargando de ello y aprovechamos este escrito para mandarles todo nuestro apoyo y amor desde la distancia y, sobre todo, agradecer su compromiso con la sociedad, los primates y el mundo.

Por supuesto, no nos olvidamos de aquellas personas que trabajan a diario para poner fin a esta enfermedad y detener su propagación. GRACIAS.

PERO…